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Es otoño y es hora de la cúrcuma, me encanta la cúrcuma y los platos de curry que también contienen curcumina.
La inflamación es a menudo el principal factor subyacente presente en casi todas las condiciones de salud crónicas, a pesar de los muchos síntomas diferentes que cada uno de nosotros pueda tener.
A menudo pensamos en la inflamación en términos de una lesión, como un esguince de tobillo o articulaciones hinchadas como se ve en la artritis, pero ¿sabías que la inflamación crónica también está presente en muchas condiciones de salud?
La cúrcuma se ha utilizado durante miles de años, tanto como alimento como medicina. La cúrcuma, una especia muy utilizada en la cocina india, contiene curcumina, que tiene fuertes efectos antioxidantes y antiinflamatorios.
Efectos beneficiosos de la cúrcuma y de la curcumina
La cúrcuma contiene compuestos activos con poderosas propiedades medicinales
Estos compuestos se denominan curcuminoides. La curcumina es el principal ingrediente activo de la cúrcuma y tiene potentes efectos antiinflamatorios. También es un antioxidante muy potente.
La curcumina es un antiinflamatorio natural
La inflamación es increíblemente importante. Ayuda al cuerpo a luchar contra los invasores extraños y también tiene un papel en la reparación de daños. Sin inflamación, los patógenos como las bacterias podrían apoderarse fácilmente de nuestros cuerpos y matarnos.
Aunque la inflamación aguda (a corto plazo) es beneficiosa, puede convertirse en un problema importante cuando es crónica (a largo plazo) y se despliega de manera inapropiada contra los propios tejidos del cuerpo. Actualmente se cree que la inflamación crónica de bajo nivel desempeña un papel importante en la mayoría de las enfermedades crónicas occidentales.
Esto incluye enfermedades cardíacas, cáncer, síndrome metabólico, Alzheimer y diversas afecciones degenerativas, en particular aquellas que afectan el sistema musculoesquelético, como la osteoartritis, la enfermedad articular degenerativa, la artritis reumatoide, la fibromialgia, los síndromes de uso excesivo (por ejemplo, tendinitis o bursitis), distensiones musculares e incluso dolor lumbar.
Cualquier cosa que pueda ayudar a combatir la inflamación crónica tiene una importancia potencial para prevenir e incluso tratar estas enfermedades y, por suerte para nosotros, resulta que la curcumina es un potente antiinflamatorio.
La cúrcuma aumenta drásticamente la capacidad antioxidante del cuerpo
Sabemos que el daño por oxidación, el daño oxidativo, es uno de los mecanismos que provoca el envejecimiento y también es el precursor de muchas enfermedades. Se trata de radicales libres, que causan daño a los tejidos de nuestro cuerpo.
La curcumina resulta ser un potente antioxidante que puede neutralizar los radicales libres debido a su estructura química. La curcumina brinda altos niveles de protección antioxidante: 13 veces más que los arándanos
La cúrcuma puede reducir el riesgo de enfermedades cardiacas
La curcumina, que se encuentra en el pigmento amarillo de la cúrcuma, puede reducir el riesgo de enfermedades cardíacas. Las enfermedades cardiacas suponen el principal motivo de fallecimiento en la actualidad. Una de las formas en que la curcumina puede ayudar a prevenir las enfermedades del corazón es mejorando la función del endotelio, el revestimiento de nuestros vasos sanguíneos.
La curcumina puede ayudar a reducir el riesgo de padecer una enfermedad cerebral
Curiosamente, la curcumina puede aumentar los niveles cerebrales del factor neurotrópico derivado del cerebro (BDNF), un tipo de hormona de crecimiento que funciona en el cerebro. La disminución de los niveles de esta hormona se ha relacionado con enfermedades cerebrales comunes.
Esto puede ser efectivo para retrasar, o incluso revertir, muchas enfermedades cerebrales y disminuciones en la función cerebral relacionadas con la edad e incluso podría ayudar a mejorar su memoria.
La enfermedad de Alzheimer es la enfermedad neurodegenerativa más común en el mundo y una de las principales causas de demencia. Podemos esperar buenas noticias en un futuro próximo, pues ya hay evidencias de que la curcumina traspasa la barrera hematoencefálica. Se conoce que la inflamación y el daño por oxidación son dos elementos importantes en el Alzheimer y, como hemos visto, la curcumina tiene un efecto beneficioso para ambos casos, además de que un asunto importante en el Alzheimer es el cúmulo de agrupaciones enredadas de proteínas que se denominan placas amiloides y se cree que la curcumina puede ayudar a acabar con ellas.
La cúrcuma tiene propiedades antimicrobianas
También se ha descubierto que la cúrcuma tiene una poderosa actividad antimicrobiana contra bacterias, hongos y virus, incluidos Candida albicans e incluso Giardia, al inhibir el crecimiento de parásitos y su capacidad de adherirse al revestimiento de la mucosa.
La cúrcuma puede ser efectiva para una variedad de trastornos gastrointestinales
La curcumina tiene poderosas propiedades antiinflamatorias que ayudan en todos los aspectos de las enfermedades inflamatorias que afectan los intestinos, incluida la enfermedad diverticular, el intestino irritable (SII), la enfermedad inflamatoria intestinal (Crohn, colitis ulcerosa), la dispepsia (acidez estomacal, náuseas, eructos) y la enfermedad péptica. enfermedad de úlcera porque ayuda a aumentar la producción de moco y proteger el estómago e intestinos. Es el revestimiento del estómago.
Aunque el síndrome del intestino irritable no tiene inflamación, la cúrcuma tiene propiedades carminativas que alivian la flatulencia y alivia el espasmo y el dolor intestinal al relajar los músculos intestinales y los esfínteres.
La cúrcuma es un gran tónico digestivo y hepático
La cúrcuma se ha utilizado tradicionalmente para apoyar la función hepática y los problemas digestivos desde la antigüedad porque ayuda a aumentar el flujo de bilis desde la vesícula biliar hacia los intestinos, lo cual es esencial para la descomposición de las grasas de la dieta. La cúrcuma también mejora la desintoxicación del hígado al apoyar la desintoxicación de fase 2 dentro del hígado y mejorar la producción y la actividad del glutatión; un potente antioxidante.
Los pacientes que sufren artritis responden muy bien a la cúrcuma
La artritis es una enfermedad muy común en occidente. Nos podemos encontrar diferentes tipos de artritis, pero en la mayoría de casos nos encontramos con inflamación en las articulaciones, convirtiendo esta enfermedad en dolorosa y, en ocasiones, hasta invalidante. Como se da el hecho que la curcumina tiene características antiinflamatorias, el que pueda ayudar a combatir la artritis parece bastante lógico.
¿Utilizas la Cúrcuma para mejorar tu estado de salud?, ¿has notado los beneficios de la cúrcuma en la mejora de alguna enfermedad?
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